Cabalgando entre el valle de Isábena y Castanesa

El sábado por la tarde me decidí a hacer una carrerita que se convirtió en una vuelta por el pequeño circo de cumbres que envuelve el bonito y solitario valle de Isábena. Salí desde Laspaúles, pueblo situado frente al Turbón, dirección hasta Villarroe, para seguir por la pista que sigue el rio Isábena. Llegando a las bordas y cruzando el rio por un puente, se continua la pista para seguir de nuevo por la izquierda y remontar el rio por su margen derecho. Pasada una caseta del agua, remontar dirección norte un fuerte desnivel hasta coronar una primera loma y rodear el pequeño circo por la derecha hasta llegar a la divisoria que separa los dos valles Isábena y Castanesa. Se corona el punto más alto con sus 2496 metros, para disfrutar desde este pequeño mirador de una espectacular vista con el Basibé, Castanesa y montes malditos -al norte- y al sur el Turbón. Pude apreciar la extensión del reciente incendio del valle de Castanesa, que aunque extenso, se podían apreciar desde la altitud pequeños brotes verdes donde la primavera se ha empeñado en borrar algo el oscuro color negro de la tierra quemada.
Continuando la carrera por las alturas se completa la vuelta al circo para descender hasta la cabaña de la Raya y dejarse caer por las empinadas laderas herbosas para llegar de nuevo al camino de vuelta a Laspaúles.
El recorrido tiene un fuerte desnivel, ya que parte de los 1400 metros de Laspaúles, siguiendo una pista de 5 km hasta comenzar las fuertes pendientes herbosas de 1100 metros de desnivel mantenido. La tranquilidad y el color verde de estas montañas, así como su orografía redondeada me hace recordar paisajes irlandeses.

Llegando al punto más alto (2.496 m)

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